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Sobre mí

Soy Clara Cullell Tebé

Desde que tengo uso de razón siempre me he dedicado a cuidar a los demás y a hacer que sus vidas sean más fáciles y tranquilas. Les he ayudado en sus problemas, asumiendo responsabilidades que no me correspondían , hasta que me dí cuenta del gran coste personal que significaba esto en mi vida.

Os explico un poco de mi vivencia personal. Desde muy pequeñita ya empecé a cuidar de mi madre. Se murió un hermano mío que tenía 3 años y mi madre quedó sumida en una depresión y dolor profundos. Yo era muy pequeña por entonces pero ya empecé a cuidarla y a no pedir nada para mi y a ser una «buena niña» para no dar problemas que es lo único que podía hacer en aquel momento. Siento que fue ya desde entonces cuando empecé a desconectar de mí y de lo que yo necesitaba o quería, ya que no había nadie a quin reclamar nada y yo pasé a un último plano.

Cuando yo tenía 12 años murió mi padre que llevaba ya varios años enfermo y yo seguí cuidando de mi madre y también de mis dos hermanos más pequeños. Siento que casi no tuve infancia ya que me tuve que hacer adulta de golpe, siendo todavía una niña.

Al llegar mi adolescencia y juventud sentí un poco de alivio al poder empezar a salir y hacer cosas que me gustaban y me hacían feliz, aunque siempre seguía cuidando de mi família.

Luego me casé y cuando ya decidimos tener niños y no venían empecé a darme cuenta de que yo no estaba bien, me sentía muy mal, muy triste y con angustia y allí empecé a hacer terapia personal, para ir desenredando todo el nudo que tenía dentro de mí.

Luego vinieron las adopciones de mis dos hijos, época muy bonita pero también muy estresante pues yo seguía cuidando de mi madre y ahora también de mi familia. Fue entonces cuando ya decidí empezar la Formación en Terapia Gestalt quería conocerme, saber que me ocurría, y también porque necesitaba un espacio propio como agua de mayo, porque ya en esa época empecé a darme cuenta de que yo me perdía en los otros.

Pero el detonante llegó unos años más tarde, con una discusión familiar muy fuerte con mi madre en la que estábamos toda la familia presente y que tuvo lugar en mi casa y justo el día que celebrábamos los cumpleaños de mis hijos. Fue como si explotara una “bomba” en mi casa, me quedé totalmente destrozada, pues todos los esfuerzos que había estado haciendo durante toda mi vida parecía ahora que no habían servido para nada. Sentí un vacío interior muy grande y empecé a darme cuenta de que estaba viviendo para los demás, que no sabía poner límites y que yo no sabía quién era ni lo que quería hacer con mi vida.

Aquí empecé la formación en Movimiento Corporal consciente para volver a conectar conmigo y con lo que yo necesitaba y quería en mi vida. Y luego también hice la Formación en EFT “Técnicas de liberación emocional” (tapping) para el desbloqueo emocional.

Me dedico a acompañar a mujeres que viven para los demás a aprender a poner límites y vivir su propia vida, porque yo he transitado este camino y me he dado cuenta de que vivir para los demás es una fuente de insatisfacción constante, nunca es suficiente y supone un coste muy elevado en nuestras vidas, ya que desconectamos de nosotras y no nos atendemos.

Cada persona tiene que seguir su camino y hacer sus propios aprendizajes. Es también muy importante aprender a diferenciar entre los temas que son de uno y los que son de los demás para no perderse en el otro. Para mí fue muy revelador darme cuenta de que, si yo siempre me voy al otro, ¿entonces quien está conmigo y quién cuida de mí? Por lo tanto, yo me necesito la primera en mi vida, y sin lugar a dudas, merezco brillar con luz propia y vivir mi propia vida.

 

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